Levantar una persiana en forma manual no solo resulta realmente molesto sino que inclusive puede llegar a ocasionar hasta un problema de salud, al tener que levantar el peso que usualmente ellas tienen. En otros casos puede ser hasta imposible pues algunos tal vez ni cuenten con la fuerza suficiente para hacerlo por sí mismos y se vean obligados a pedir ayuda cada vez que necesiten subirla.
Es esta la principal razón por la que las persianas automáticas han ganado una gran popularidad, pues evitan los problemas de salud, al hacer innecesario realizar cualquier esfuerzo y eliminan la necesidad de solicitar ayuda constantemente.
Dicho lo anterior y habiendo quedado claro que cada vez con mayor frecuencia estaremos cerca de una persiana motorizada, cobra una gran importancia conocer la mayor cantidad de información posible respecto a ellas. Ahora bien de todas las partes que integran una persiana en este caso el fundamental es el elemento que automatiza una persiana, por lo tanto sin duda, siendo el motor el eje del funcionamiento de la misma, saber cómo elegir un motor que nos permita tener una persiana automatizada es un asunto clave.
Ventajas de las persianas motorizadas
La comodidad que aportan este tipo de persianas automáticas es uno de sus baluartes principales, pues apenas pulsando un simple botón lograremos hacer que ella suba o baje a nuestro antojo sin necesidad de realizar ningún esfuerzo físico.
Además en el mercado es posible conseguir actualmente modelos de persianas automatizadas que pueden programarse para la apertura y el cierre en un horario determinado. Según las especificaciones técnicas estas suponen también una mayor eficiencia energética al reducir el consumo de energía en aproximadamente un 10 % respecto a las que no cuentan con esta función.
Ya se sabe que las persianas automatizadas aportan un nivel de confort superior a las viviendas, pero además son un elemento importante para aumentar la seguridad de un hogar, especialmente las que son programables para la subida y la bajada en determinados momentos del día o de la noche. De esta forma aparentan la ocupación del inmueble, aunque en realidad se encuentren solos y está suficientemente demostrado que si algo desincentiva el ingreso de los ladrones es la presencia de personas al momento del hurto.
El hecho de no tener que levantarnos de la cama o el sofá para abrir o cerrar una persiana ya no es solamente un elemento de comodidad y confort, en la actualidad se ha convertido en una medida de prevención y por lo tanto en un incremento del nivel de seguridad.
Lograr motorizar la persiana tan solo requiere de un poco de maña pues colocar los mecanismos necesarios para ello no reviste de ninguna complejidad. Por otra parte también debe señalarse que una de las características que distingue a las persianas automatizadas es que las mismas resultan extraordinariamente fáciles de instalar, pero si los trabajos manuales no se le dan tan bien o no se anima a intentarlo, cualquier profesional podrá hacerlo en tan solo un momento.
En general puede resumirse el funcionamiento de las persianas automatizadas del modo siguiente: disponen o se les instala un motor de pequeñas dimensiones, en el extremo superior lo que permitirá el cierre y la apertura.
En el caso que la persiana que se va a instalar tenga una manivela de emergencia esto puede considerarse una ventaja adicional, pues significa que en el caso de un corte de la luz la persiana igual podrá ser manejada en forma manual, consiguiendo de esta forma subirla o bajarla según lo que se requiera.
¿Cuáles son las claves de las persianas automatizadas?
Aunque por lo que ofrecen pudiese parecer lo contrario, una de las principales claves de las persianas motorizadas es que las mismas suponen un coste de energía muy bajo. Pero además inclusive producen una reducción en el consumo energético ya que si se programan convenientemente, pueden ayudar en la utilización de la luz natural para iluminar los ambientes durante el día.
Aunque parezcan salidas de la ciencia ficción hoy en día las persianas automáticas pueden ser activadas de distintas maneras, bien mediante un botón colocado en alguna de las paredes, mediante un mando a distancia e inclusive a través de un teléfono inteligente al lograr ser conectadas al Wifi de la casa. Es así como puede decirse que otra de las grandes claves de este tipo de persianas está en el método de accionado de las mismas.
Es más inclusive en el mercado es posible conseguir algunos modelos que detectan el nivel de luminosidad natural y responden a ello aumentando o disminuyendo la cantidad de luz necesaria que debe ingresar desde el exterior para mantener el nivel de iluminación adecuado en los ambientes. Con esto no solo se logra limitar la necesidad de encender los bombillos sino que además se consigue regular de algún modo el nivel de temperatura interior, pues al dejar pasar la luz del sol se consigue aumentar la temperatura en el invierno y al limitarla en el verano, si esta llega a ser excesiva se reduce el calor. Esta es otra gran contribución para el ahorro en la factura de la luz que se puede conseguir con las persianas automatizadas.
¿Qué hay que mirar al comprar un motor para una persiana?
Las cintas de las persianas típicamente son de cualquiera de los dos tamaños siguientes: de 23 cm o de 15 cm. Sabiendo esto puede decirse que el ancho de la cinta de la persiana es uno de los elementos principales para tener en cuenta llegado el momento de escoger un motor.
Otro elemento a considerar especialmente porque incide en el peso es el material de fabricación de la persiana, usualmente estas son de metal o de plástico. Siendo estas últimas las que más frecuentemente se utilizan en el interior de una casa.
Tipos de motores
En cuanto a la tipología de los motores utilizados para motorizar persianas debe señalarse que estos son básicamente de dos tipos: los tubulares que son los usados más frecuentemente y los de cinta que aunque no son tan populares han ido creciendo en cuanto a su uso.
Motores tubulares
Los motores tubulares se instalan dentro del cilindro de la persiana, por lo tanto son los más fáciles de colocar siguiendo tan solo unos cuantos pasos.
- Se coloca el motor en el interior del cilindro hasta llegar al tope.
- Se inserta el conjunto en el cajón de la persiana y se procede a preparar la prueba del funcionamiento del sistema
- Se procede a conectar el motor de la persiana a la alimentación de energía eléctrica
- Se revisa el sistema por completo, tanto el mecanismo de apertura y de cierre como a la persiana en sí misma.
Motores de cinta o no tubulares
Los denominados motores no tubulares o también conocidos como de cinta pueden ser de empotrar o de superficie. Veamos en qué consisten cada una de estas variantes.
Los motores de empotrar son ideales para aquellos que le dan importancia a la estética pues el acabado es muy bonito ya que resultan prácticamente imperceptibles al ir instalados en la parte donde se recoge la cuerda de la persiana.
La única limitación es que esta solución solamente será aplicable cuando se disponga de un espacio de al menos 14 cm, en caso contrario habrá que utilizar los de superficie.
Los motores de superficie resultan ideales para las persianas que carecen completamente de hueco y también para los que buscan productos fáciles de instalar al no presentar ninguna complicación en este sentido. Para hacerlo tan solo es preciso cambiar el cajetín de la persiana y listo.
Extras a tener en cuenta a la hora de comprar un motor para persianas
Existen distintos extras que se pueden incorporar a las persianas motorizadas, señalemos los tres más convenientes:
- Los sensores solares: con ellos conseguiremos regular el nivel de temperatura interior y el grado de luminosidad mediante la programación de la subida y bajada automática de las persianas.
- El mando a distancia: es evidentemente un extra que otorga una gran comodidad al permitir accionar la persiana sin necesidad de moverse.
- Los mecanismos programables: que nos harán ganar en seguridad y confort al permitir la programación de los momentos oportunos para la subida y bajada de las persianas.
¿Cómo elegir el motor adecuado para cada persona?
Son dos las principales variables a tomar en consideración al momento de seleccionar el motor de una persiana, uno de ellos es el peso y el otro es el diámetro de su eje.
Usualmente los ejes pueden ser de 40 cm o de 60 cm y el peso de la persiana requerirá de una potencia específica para lograr levantarla.
Al comprar un motor no deje de revisar las especificaciones del fabricante que suelen estar en la caja o en el manual, allí se indica la cantidad de peso que este podrá levantar de acuerdo a la potencia de la que disponga y también el diámetro de eje que necesita para ser instalado.